Desde la Liga Mendocina de Fútbol confirmaron que la final del torneo Vendimia entre Godoy Cruz e Independiente Rivadavia, sumado a la edición 2019 del certamen, quedaron suspendidas y dadas de baja.
Además, desde el organismo rector del fútbol mendocino acusan al Ministerio de Seguridad por la intransigencia que existe en las áreas competentes.
El comunicado
Malestar en el Gobierno
El día jueves debía definirse el operativo de seguridad para la final del torneo "Vendimia" de fútbol del próximo 14 de octubre. Néstor Majul, Subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad, había aclarado que debían concurrir las tres partes: Godoy Cruz, Independiente Rivadavia y Liga Mendocina. Algo que no sucedió.
Ante la falta de un representante del Tomba, le explican a Majul que había muchas probabilidades de que Godoy Cruz no pudiese jugar el partido.
Con lo cual, inmediatamente, la reunión carecía de todo sentido. Es decir, la Liga sabía perfectamente que Godoy Cruz no iba a poder jugar la final y pretendía avanzar en un operativo “por las dudas” que pudiese darse vaya uno a saber qué cosa.
"Acabo de leer el comunicado de la Liga y no tiene sentido, les pedí que no usaran a la Seguridad como pretexto de la suspensión; la Liga no tiene ni idea del operativo ni de los costos porque nunca alcanzamos a hablar de plata. Ellos sabían que uno de los clubes no iban a poder jugar el partido entonces no tenía sentido charlar del operativo", disparó molesto Majul.
La final fue un engaño desde un principio. Incluso, antes del inicio del Torneo Vendimia había trascendido que si el Tomba y la Lepra llegaban a la final, el partido no se jugaba. Algo que finalmente terminó sucediendo por lo que esta suspensión era un secreto a voces. La Liga organizó un torneo entre cuatro equipos, sabiendo de antemano que dos de ellos no podían enfrentarse entre sí. Muy poco serio.
