El diputado Marío Díaz, acusado por su ex pareja de amenaza de muerte, lloró esta mañana en la Legislatura y dijo que es inocente. Aseguró que es todo una mentira montada por quien fuera su compañera durante largos años y de quién estaba separado hace tres años, Gabriela Noé.
“Todo es una mentira montada por ella” dijo y aseguró que la denuncia fue porque él le pidió el divorcio legal.
Díaz está imputado y hoy, cuando los diputados provinciales volvieron a sesionar, pidió la palabra para aclarar su situación ante sus colegas. “Debo enfrentar esto con mis pares y en la Justicia. Esta situación quiebra mi alma", sentenció entre lágrimas, según informa Diario Los Andes.