Mientras intentar dar con el paradero de la mujer, dueña de un Rapipago que funcionaba en el supermercado Vea de Videla Correas y avenida San Martín de Ciudad, siguen lloviendo las denunciada por presuntas estafas.
Los damnificados descubrieron varios días después que sus facturas no habían sido pagadas y, en muchos casos, sufrieron el corte de los servicios por falta de pago.
A la desagradable sorpresa se sumó el hecho de que cuando fueron a reclamar el Rapipago había sido cerrado.
De acuerdo a lo relatado por las víctimas en redes sociales, el modus operandi de la mujer consistía en decirles que no funcionaba el sistema y pedirles que le dejaran el dinero para luego pagar las facturas. A cambio la mujer les entregaba un comprobante escrito a mano con letra ilegible o les prometía que les enviaría el comprobante por Whatsapp. Fuente: Mdz