Janet había salido a comer con unos amigos y cuando volvió se encontró una masacre en su vivienda. Su madre, Alejandra Ferreyra de 49 años, Karen Arenas de 22 -su hermana- y su hijo Yariel, de 4 años, habían sido asesinados. Todo indica que el cuñado de Janet, Ezequiel Ledesma, sería el autor del hecho. Actualmente es el único imputado y detenido por el fiscal Carlos Torres.
Hoy Janet relató cómo sigue con su vida después de tanto dolor. Está convencida de que por celos este hombre mató a su hermana, su mamá y su pequeño hijo. "Sigo destruida, sigo pensando a cada rato lo que vi y lo que pasó. Estoy con pastillas porque de otra forma no puedo seguir. Estoy acompañada de amigos que vienen a cada rato, como puedo nada más", declaró en Canal 9.
"Como ellos estaban peleados el único que pudo abrir la puerta fue él. Yo cuando me fui dejé todo cerrado, hasta el mismo fiscal dijo que le habían abierto la puerta. Después vinieron testigos que no se animaron a declarar y vinieron a decirme que lo vieron. De mi casa no se han llevado nada, así que fue él. Ella no quería saber nada con él hace como dos meses ya", contó.
"Él era muy celoso él. Pero es increíble porque nunca imaginamos esto. Él estaba todo el día en mi casa, nunca imaginamos que pudiera hacer todo eso. Era muy obsesivo. Se peleaban y a cada rato estaba en la puerta o la ventana 'Karen abrime, Karen, Karen'. A cada rato".
"Mucho mi hermana no hablaba conmigo, sí lo hacía con una prima que vino y me contó después de todo esto, me mostró los mensajes y era así. Ella no quería estar más con él".
Janet, luego, relató cómo fue el momento en el que arribó a la casa tras salir con unos amitos: "Cuando entré gritaba para que alguien me ayudara, pero a la vez no podía entender, quería despertar a mi hijo. Llamé a una amiga que entró, se tapó la cara y salió. Yo seguí ahí, sin llorar ni nada, porque los quería levantar, no lo podía creer. Veía todo lleno de sangre, pero no quería imaginar que estaban muertos".
"Quería despertar a toda costa a mi hijo, porque mi mamá y mi hermana tenían todo el piso lleno de sangre. Mi hijo no tenía tanto, pero cuando le toqué la carita le vi que tenía todo abierto. Hasta con mi mamá parece que se ensañó en el piso con ella. Atrás tenía todo abierto, fue muchísimo", concluyó.