"Tornello no va a pasar, porque no queremos crear más puestos políticos en el Instituto y porque está flojo de papeles: tuvo una causa en Fiscalía de Estado por poseer dos cargos", anticiparon en la Casa de Gobierno.
Luego del fracaso de la sesión especial para tratar la ampliación de la Corte, costaría encontrar un motivo de celebración para la cena que organizó Alfredo Cornejo en la residencia oficial el martes en la noche. "Fue de agradecimiento", explicaron voceros oficiales.
Los invitados fueron el bloque de diputados radicales en pleno, más los extrapartidarios del PRO y Unión Popular (el partido de Jorge Difonso) y el presidente de la Cámara de Diputados, Néstor Parés.
Un rato antes, este disciplinado grupo se había comido otro sapo en la Legislatura, que está paralizada hace meses por el sueño inalcanzable del gobernador, que insiste en ampliar de 7 a 9 los miembros de la Corte, a pesar del rechazo masivo de la oposición.
Luego, Alfredo Cornejo juntó a los intendentes oficialistas (esta vez sí estuvo Garay), con el objeto de abroquelarse para enfrentar una etapa de tormentas políticas.
Además, oficialistas comentaron que existe un "eje opositor", compuesto por los diputados nacionales José Luis Ramón y Félix, y por el ministro de la Corte Mario Adaro, que conspira contra el Gobierno a favor del justicialismo. Fuente: Mdz