En el informe del Cuerpo Médico Forense reveló que Rodrigo Martínez, de 17 años, tenía 18 orificios en su cuerpo de entrada y salida de los proyectiles que le disparó el policía. A pesar de ello, el policía de Mendoza no fue imputado y quedó libertad ya que la Justicia entiende que actuó en legítima defensa. Una mujer declaró y confirmó la versión del efectivo.
El efectivo tiene 22 años y trabaja en el cuerpo de Infantería. Después las 22 del jueves dos jóvenes habrían intentado asaltarlo cuando hacía ejercicio por la ciclovía de Las Heras.
Las investigaciones revelan, que los dos presuntos asaltantes circulaban en moto, quienes amenazaron con armas y le dispararon al agente policial.
Ante esta acción, el policía reaccionó y sacó su arma reglamentaria y disparó al menos nueve veces contra los agresores, mientras uno de ellos decía "Matalo, matalo".
Rodrigo Martínez cayó muerto en el lugar y al lado de su cuerpo secuestraron una pistola 9 milímetros a la que le quedaban solo dos proyectiles.
