Un momento de tensión se vivió el mediodía de este martes en la Ciclovía de Godoy Cruz cuando los vecinos vieron a una víbora que se deslizaba por el suelo donde pasan a diario cientos de personas, algunas hacen ejercicio e inclusive dejan a los niños jugar en el pasto. Fue en Anzorena y Beltrán.
Los vecinos llamaron a la Policía y se hizo presente en el lugar un móvil con un hombre y una mujer. El revuelo llamó la atención de una familia que pasaba por allí y decidió acercarse.
Fue Heber Ortíz, el padre de esa familia, quien se animó a capturar a la serpiente, que se trata de una culebra ratonera. Se ayudó con un palo para que el animal se enrollara en su brazo y así poder sujetarla del cuello y que no lo mordiera.
Metió al animal en una bolsa y lo llevó a su hábitat natural.
Este tipo de víboras habita en los cerros del pedemonte de Mendoza, en ocasiones llegan hasta algunos barrios del oeste provincial, por su cercanía, pero no es usual verlas en plena ciudad.
Estas serpientes son las de mayor tamaño, pudiendo llegar a los 2 metros de largo. Tienen la cabeza alargada y hocico puntiagudo.