El intendente de Capital, Ulpiano Suárez, aseguró que habrá durante el aislamiento obligatorio con control vehicular, de comercios y precios, más estrictos a los ya implementados y descartó que pueda existir en el corto plazo una flexibilización de la cuarentena para la reapertura de bares o restaurantes y hoteles.
Suárez admitió que desde los sectores que nuclean a los bares, restaurantes, alojamientos, servicios profesionales (abogados, contadores, arquitectos) que tienen su actividad en la Ciudad le han pedido que analice la posibilidad de flexibilizar la medida.
Ante ese requerimiento, el intendente fue inflexible y sostuvo que se mantendrá la situación como hasta ahora.
"De ninguna manera está en los planes del municipio pedirle al gobernador abrir 500 restaurantes, 180 hoteles y 1.500 negocios", dijo a Los Andes.
Tampoco está previsto algún tipo de ayuda para los sectores del comercio que se vean más afectados. "No estamos en condiciones de adelantar algún beneficio fiscal", sentenció el jefe comunal.
Según explicó, desde Hacienda avisaron que habrá una disminución de la coparticipación, por lo que “el otro 50 por ciento de los ingresos del municipio tendrá una disminución del 23 por ciento”.
Dentro del panorama complicado para las arcas comunales, el Intendente aclaró que se van a pagar los sueldos de abril, mayo "y con suerte, el aguinaldo".