De cara al inicio de las negociaciones paritarias -las que tendrán lugar los días 10,11 y 12 de marzo- el Gobierno de Mendoza baraja una estrategia que se basa en un ofrecimiento diferenciado según cuánto cobre cada estatal. Para quienes ganen menos, el porcentaje de aumento será mayor, y para quienes perciban mayores sueldos, el porcentaje será menor.
Esta negociación será la primera de Rodolfo Suarez como gobernador de la provincia. Será en el marco de la negativa del Partido Justicialista (PJ) de aceptar un endeudamiento de U$S 300 millones para obras públicas, más la imposibilidad de renegociar $6.500 millones de deuda (roll-over), algo que desde el Gobierno sostienen que impactará de manera negativa en la negociación salarial.
Además, el Gobernador anunció desde su campaña el rechazo a la cláusula gatillo. Ante esta situación, es que la estrategia del Gobierno será segmentar a los trabajadores estatales entre los que más ganan y los que menos ganan.
"Vamos a llevar una propuesta: quienes menos perciben tengan un incremento mayor", aseguró el ministro de Gobierno, Víctor Ibáñez, a diario Los Andes. Y agregó que los números los está trabajando el ministro de Hacienda, Lisandro Nieri.
Posiblemente el Gobierno provincial ofrezca una suba salarial, dividida en tramos y según la pauta enviada por el Ejecutivo, se prevé una variación anual del Índice de Precios al Consumidor de un 34,2%.
