Con el objetivo de presentar un informe contra el Vaticano por encubrimiento, este viernes un grupo de víctimas de abusos sexuales cometidos en el exinstituto religioso para niños sordos Antonio Próvolo y dos de sus abogados, viajan desde Mendoza a la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Ginebra, Suiza. Luego parten a Roma, donde buscan ser recibidos por el papa Francisco.
El viaje será del 14 y al 22 de febrero y surgió a través de una invitación de Ending Clergy Abuse - ECA (por su nombre y sigla en inglés), una organización internacional que lucha por el fin del abuso eclesiástico en el mundo, detallaron.
El contingente presentará el caso ante el Comité Contra la Tortura (CAT, por su sigla en inglés) y el Comité de los Derechos del Niño (CRC, por su sigla en inglés) en la ciudad de Ginebra (Suiza), detallaron desde la organización de Derechos Humanos Xumek.
La intención del viaje "es seguir visibilizando esta causa que ha llevado a cabo una condena por parte de la Justicia de Mendoza y que en sede internacional se sepa que la iglesia católica encubre los delitos que se han producido en el Próvolo de Mendoza", explicó el abogado querellante y miembro de Xumek, Sergio Salinas, a Télam.
Agregó que van a "denunciar al estado Vaticano que está encubriendo (los abusos) con la conducta delictiva de sus empleados en Argentina".El abogado apuntó contra el obispo auxiliar de La Plata, Alberto Bochatey, interventor de la iglesia católica en el caso Próvolo, representando al Vaticano, y contra Dante Simón, el vicario judicial que investigó, por orden de la Santa Sede los abusos en el instituto, que funcionaba en la ciudad mendocina Luján de Cuyo.
Posteriormente viajarán a Roma, para reunirse con organizaciones que luchan por el fin del abuso eclesiástico y sobrevivientes y aún esperan una respuesta ante la solicitud de audiencia con el papa Francisco, informaron desde Xumek.
Las condenas
A fines de noviembre pasado los curas Horacio Corbacho (59) y Nicola Corradi (83) fueron condenados a la pena de 45 y 42 años de prisión respectivamente, y el jardinero Armando Gómez (49) a 18 años, por los abusos sexuales cometidos a niños sordos dentro del instituto.
El histórico veredicto fue dictado en Mendoza por los jueces Carlos Díaz, Mauricio Juan y Aníbal Crivelli, y marcó una condena emblemática contra la iglesia, con amplia repercusión mundial.
Por otra parte, estas ultimas semanas comenzaron las audiencias preliminares para llegar al segundo juicio por el caso Próvolo- que aun no tiene fecha- yen las que hay nueve imputadas, entre ellas las monjas Kumiko Kosaka y Asunción Martínez, además de las ex apoderada legal del Instituto, Graciela Pascual.