En Mendoza, seis exagentes penitenciarios fueron condenados a diez años de prisión por haber torturado en 2010 a un joven detenido en el Complejo San Felipe, informaron fuentes Judiciales.
El fallo del Tribunal Penal Colegiado 1 de Mendoza recayó sobre Germán Núñez Aciar, José Arredondo, Luís D'ambrosio, Daniel Perón, Edgardo Quero Rey y Jonathan Bizaguirre, quienes continuarán en libertad hasta que la condena quede firme, ya que pueden recurrir ante la Suprema Corte de Justicia, indicaron.
El Tribunal, conformado por los jueces Agustín Pedro Chacón, María Belén Salido y Gabriela Muratti, también dictó la inhabilitación absoluta para ocupar cargos públicos a los condenados, por el hecho en que fue víctima William Walter Vargas González.
El episodio se conoció en 2011 cuando salió a la luz un video, captada con un teléfono celular, en el cual se observa a varios penitenciarios torturando a un recluso, material que llegó a la ONG Xumek, una asociación para la promoción y protección de los Derechos Humanos quien presentó una denuncia ante la Fiscalía de Homicidios y Violencia Institucional.
En el video se observa como varios agentes penitenciarios le daban golpes de puño y patadas a un recluso que estaba arrodillado en el piso, con las manos en su espalda y esposadas con un cinturón a una ventana del penal, y obligándolo a flexionar los brazos desde la cintura hacia la cabeza ante el grito de dolor del joven.
Sobre las imágenes, Xumek dijo que se ve cómo González pidió por favor que terminen, y gritando que le dolía la costilla, mientras los exagentes continuaban golpeándolo en la zona intercostal, estirando hacia arriba sus brazos en sentido contrario a la flexión natural.
El juicio duró cerca de cuatro meses y concluyó con la condena a los exagentes, cuyos abogados defensores cuestionaron, tanto en el debate y en los alegatos, el material fílmico, sobre la base de que -afirmaban- no se podía acreditar la identidad de la víctima en el video.
Por su parte el fiscal, Sebastián Capizzi, pidió una pena de diez años, mismo pedido que fue acompañado por el representante de la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación, el abogado Fernando Peñaloza.
El Tribunal finalmente rechazó el pedido hecho por la defensa apoyados en las declaraciones de testigos, entre ellos el de González, quienes ratificaron que las torturas eran frecuentes en el penal.
Sobre la condena, Lucas Lecour, presidente de la ONG Xumek de la querella, dijo a Télam: "La pena es justa, entendemos que está bien, nosotros habíamos pedido 14 años, pero sabíamos que una pena de diez años estaba bien".
"Otra cosa que nos dio una satisfacción importante es que la pena no solo es la prisión para los expenitenciarios, sino que ordenaron medidas de no repetición que están vinculadas a la capacitación al Ministerio Publico Fiscal para la investigación en delitos de torturas", señaló Lecour.
En tanto, la ONG concluyó en un comunicado: "Entendemos que esta condena resulta un mensaje fundamental hacia las fuerzas de seguridad y penitenciarias contra la impunidad de estos aberrantes delitos, sancionando debidamente estos graves hechos".