La jueza María Eugenia Torres, del Juzgado de Instrucción de Violencia de Género N° 1 de La Rioja, el domingo 5 ordenó allanar y secuestrar el material periodístico que tenía la comunicadora Manuela Calvo sobre el Caso Arcoíris, una causa contra un hombre por abusar de su nieta de 6 años.
Bajo la carátula por “desobediencia a la autoridad”, la magistrada autorizó que la policía se lleve su celular, computadora y todo dispositivo electrónico que se encuentre en poder de la periodista e incluso de su marido, así como todos los documentos relacionados con el caso de la niña.
Hacía 10 meses que Calvo estaba trabajando en un documental de dibujos animados de ficción sobre la causa de abuso a la menor. A pesar de haber acatado órdenes anteriores de borrar las referencias que la periodista hizo en sus redes sociales sobre el tema, la jueza igualmente ordenó el allanamiento.
Caso Arcoíris: distintos medios y organizaciones expresaron su apoyo a Manuela Calvo
Frente a esto, desde la Red de Comunicadoras de La Rioja difundió y repudió el accionar de la Justicia provincial contra la libertad de expresión y de prensa. A su vez, recordó aquella vez -hace dos meses- en que la periodista fue intimada para que no se pronuncie sobre el caso Arcoíris.
En un comunicado que publicó, también señaló: “Y en un claro hecho de censura previa, prohibió el estreno de un corto ficcional que hablaba, en general, de casos de abuso sexual infantil y las revinculaciones forzosas con los denunciados”.
Calificaron la medida de allanamiento y secuestro de material de la periodista como un extremo recurso judicial. Indicaron que la Justicia riojana intenta prohibir la difusión de información y, a su vez, acallar todo lo referido a un caso emblemático en la provincia que, desde hace tres años, los movimientos, organizaciones y medios feministas vienen denunciando por vulnerar el derecho de las infancias.
“También advertimos la llamativa, y muy poco común, premura de la Justicia de La Rioja para actuar y ordenar un allanamiento (un domingo por la mañana) en la casa de una comunicadora que viene reflejando el caso, al igual que muchas otras en la provincia”, agregaron desde la red.
En este sentido, exigieron que se devuelva el material y las herramientas de trabajo de Calvo, al tiempo en que pidieron una intervención urgente de autoridades y organismos provinciales, nacionales e internacionales de Derechos Humanos para proteger el derecho a la libertad de expresión y el libre ejercicio de la profesión periodística en todas sus formas.
Los miembros de la Red también solicitaron el cese de la persecución judicial riojana a comunicadoras feministas que vienen reflejando en sus agendas y en los medios la vulneración a las infancias. Ahora bien, no es el único lugar desde donde se presentaron quejas.
El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) también expresó su malestar frente a esta situación y redactó en sus redes sociales: “FOPEA advierte sobre la gravedad institucional del allanamiento dispuesto este domingo por la Justicia riojana al domicilio de la comunicadora Manuela Calvo, y reclama a las autoridades la inmediata devolución de las herramientas de trabajo secuestradas a la colega”.
La organización advirtió que la medida judicial implica un avance claro sobre la libertad de expresión y que peligran garantías constitucionales, como el secreto de las fuentes de información periodísticas. Dicha protección está contenida incluso en los tratados internacionales de derechos humanos a los cuales Argentina adhiere, por lo que se trata de un derecho fundamental.
Por su parte, el secretario de la Defensoría del Público, Pascual Calicchio, escribió a través de su cuenta de Twitter: “URGENTE: Hace algunas horas allanan la casa de la comunicadora riojana, Manuela Calvo, y se llevan sus herramientas de trabajo”. Luego mostró la orden de allanamiento y agregó: “Manuela es parte del movimiento Ni Una Menos en La Rioja y viene siguiendo el caso conocido como ‘Caso Arcoíris’”.
Después comentó sobre el caso de Arcoíris, la niña que fue abusada por su abuelo. Su madre denunció en cinco oportunidades al sujeto y, aun así, terminó denunciada ella misma por desobediencia a la autoridad.
El domingo, después del allanamiento a la periodista, desde la organización Identidad convocaron una movilización en La Rioja. Ese día se reunieron varias agrupaciones en la Plaza 9 de Julio a las 16:00 horas y protestaron contra el “ataque a la libertad de expresión y el ataque a la comunicadora Manuela Calvo”, según publicaron.