Dicho monumento, ubicado por calle Julio Cesar Corzo representa al sol, la luna, la vida y al hombre con la figura de un chayero antiguo que acoge a la memoria de las viejas chayas, que tiene como el propósito embellecer la ciudad a través de esculturas que representen y cuenten con nuestras historias y tradiciones riojanas.
La escultura cuenta con aproximadamente dos metros de altura realizado con cemento directo sin moldes; la creación del mismo fue responsabilidad del escultor riojano Alejandro “Pocho” Carrizo y el pintor chileciteño José Luis Gonzáles.
En esta oportunidad el Intendente, Alberto Paredes Urquiza felicitó por tan representativo trabajo y aclaró que "esta obra tiene un gran significado al igual a la inauguramos en la entrada del barrio Alunai, y esa es la idea que nuestra ciudad tenga sus esculturas que puedan contar la historia de La Rioja y como está seguro habrá muchas más en toda la ciudad"
A su vez expresó que “tenemos que seguir manteniendo nuestras raíces vivas, a nuestra cultura que es la que nos han ido dejando nuestras familias, padres y abuelos, porque es lo que nos representa. Tenemos una de las tradiciones ancestrales más lindas que nos permiten compartir en familia y con amigos a pesar de lo malo, podemos vivir cosas que nos traigan alegría”
Por su parte el escultor riojano, Alejandro "Pocho" Carrizo remarcó que "la idea principal es poder reflejar nuestras tradiciones y la alegría que representa, los recuerdos además del hombre que festeja después de un año de trabajo que simboliza a nuestros ancestros. Esta escultura la doné para que sea de todos los riojanos"