El platense Leopoldo Soibelzon, que estudió Ciencias Naturales en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y es investigador del CONICET, encontró en una caverna submarina en México restos fósiles de osos y lobos de hace más de 15 mil años. Creen que habrían emigrado por mejores condiciones del ambiente.
Los buzos profesionales que participaron del hallazgo encontraron cráneos, mandíbulas y dientes mientras realizaban la investigación en Hoyo Negro, que son cuevas subterráneas que están al norte de Yucatán.
"Creemos que en determinado momento las condiciones ambientales de Centroamérica y el sur de América del Norte comenzaron a cambiar y se volvieron favorables para que alguna de estas formas animales volvieran a cruzarse de continente. Eso tiene que haber sucedido unos pocos años antes de extinguirse", sostuvo Soibelzon según informó El Día.
Se estima que los restos de los osos y lobos son de las especies Arctotherium y Proctocyon respectivamente, y que se habrían mudado de continente luego del fenómeno llamado "Gran Intercambio Biótico" en donde muchas especies se fueron de un hemisferio a otro.
Los científicos creían que una vez que se asentaron, no se habían trasladado a otro lugar. Sin embargo, los restos encontrados son de 12 y 38 mil años, lo que prueba que sí lo hicieron, según compartió la revista Biology Letters.