Luego de la convocatoria para otorgar la licitación del espacio público municipal de La Laguna Azul, la empresa Brussoni SAS fue la que obtuvo la concesión durante 3 años con derecho a renovar por tres más, siempre y cuando cumpla los requisitos del pliego de licitación.
Vía La Calera estuvo recorriendo el predio para observar en qué condiciones se encuentra ese maravilloso lugar (donde antes era una cantera), y con qué servicios cuenta los turistas y vecinos.
En primer lugar, se ha extendido el ingreso para el estacionamiento, y se cobra $ 500 por auto. Al lado del estacionamiento, se destinó un lugar para depositar “basura chatarra”, que sería trasladado por camiones de recolección de residuos municipal.
Una vez dentro del predio, se destaca un sector vedado para el público en general, que era el anterior lugar donde estaba las estructuras del boliche La Felipa, las palapas (había mesas y sillas, con una especie de sombrilla de tela), la barra (donde se vendía alimentos y bebidas) y el sector de wakepark, donde se están realizando trabajos de remodelación.
Hay un camino que lleva a las nuevas playas de la Laguna Azul, que se extiende un poco más que el año pasado. Allí se encuentran un stand de venta de bebidas y un gazebo donde se ubican 3 guadavidas municipales. Hay baños químicos y se recomienda llevar sombrillas y reposeras, ya que todavía no cuentan con esos elementos.
La entrada es libre y gratuita, el horario es de 10 a 20 hs, hasta el momento, todos los días. Se tiene previsto tener un día cerrado por tareas de mantenimiento. De acuerdo con lo conversado con los representantes de la firma, tienen planificado abrir un restaurante nocturno.
Para llegar al lugar, se tiene que tomar la ruta E-64, que une La Calera con Saldán y, a la altura de la ex-fábrica Minetti, doblar hacia el puente que lleva al barrio La Otra Banda, y seguir por el camino de la derecha. Se aconseja preguntar a un vecino del lugar, ya que hay poca cartelería.