Por iniciativa del comisionado municipal de Yavi, Antonio Borja, y el acompañamiento del intendente de La Quiaca, Dante Velázquez, este fin de semana se realizó en la frontera de la Argentina con Bolivia un recorrido y posterior encuentro de las autoridades jujeñas con miembros del Comité Impulsor del proyecto boliviano “Ruta del Bicentenario”, a fin de expresar en conjunto el apoyo de las comunidades de la región al Corredor Biocéanico del Capricornio (CBC).
El encuentro tuvo lugar en territorio boliviano, en la comunidad de San Antonio de Rota -limítrofe con la localidad de Larcas, provincia de Jujuy-, hasta donde llegaron los jefes comunales Velázquez y Borja junto al secretario de Hacienda de La Quiaca, Félix Alderete, y otros funcionarios de ese municipio y la comuna yaveña. En el trayecto, la comitiva recorrió diferentes pueblos de la zona y de esa manera se fueron sumando también integrantes de diferentes comunidades originarias.
Allí se reunieron con la delegación boliviana del Comité Impulsor del proyecto “Ruta del Bicentenario” -un enlace vial pensado para unir la ciudad boliviana de Tarija con San Salvador de Jujuy- encabezada por su presidente René Aguilera Fierro; el ingeniero Antonio Calvimontes, funcionario de la Alcaldía Municipal de Tarija; y la doctora Adriana Burgos, de la Universidad Autónoma “Juan Misael Saracho” de Tarija, informaron voceros del municipio quiaqueño.
“Tenemos que ponernos en un contexto geopolítico muy diferente, el mundo ha cambiado, y el proyecto del Corredor Bioceánico Capricornio significará generar oportunidades para nuestra gente ahora y dentro de veinte, treinta años, y yo, dentro de la cuota de poder que me ha dado el soberano, el pueblo, tengo que generar oportunidades”, dijo el intendente Dante Velázquez al fundamentar su apoyo al proyecto que se ha venido visibilizando desde Brasil hasta Chile en las últimas semanas para que recobre impulso.
En la misma línea el comisionado municipal de Yavi aseveró que “el proyecto, aunque parezca inalcanzable, tiene la aprobación -dijo Borja- de los representantes de todas las comunidades originarias” a las cuales representa, situadas en aquella región a más de 300 km de San San Salvador de Jujuy.
El Corredor Bioceánico Capricornio, un proyecto que nació en 2015, es una ruta terrestre que busca unir a través de nuevas carreteras y de vías ya existentes el centro oeste de Brasil, el Chaco paraguayo y las provincias argentinas de Salta y Jujuy con el norte de Chile y los puertos en Antofagasta, Mejillones e Iquique.
El espacio geográfico atravesado por el CBC comprende a más de 30 millones de habitantes y en el área existen abundantes recursos minerales y agropecuarios, principalmente en el norte argentino.
“El Corredor Biocéanico que se pretende trazar es un sueño muy ambicioso que comparten el alcalde de Tarija y los jefes comunales de la frontera de Argentina”, se dijo en el acto en Larcas, donde las autoridades afirmaron también que este enlace vial que atraviesa territorio jujeño utilizando el Paso de Jama “será la vía que cuente con la mayor integración y participación de las comisiones municipales no solo del lado argentino sino de las comunidades y comisiones municipales de los hermanos bolivianos”.
Como vínculo eficaz entre Bolivia y el Corredor Bioceánico Capricornio aparece entonces la “Ruta del Bicentenario” desde Tarija a La Quiaca.
“Las fronteras tienen vida propia, tenemos comunidades olvidadas y abandonadas, el corredor turístico tiene el objetivo de crear un polo de desarrollo e integración histórica y salir de la centralización. Estamos hermanados en todos los sentidos. Tenemos mucha historia que está oculta o se ignora”, decía respecto del proyecto “Ruta del Bicentenario” un texto leído en San Antonio de Rota.
Velázquez señaló en este marco que “la reactivación del turismo regional, del la economía local y la generación de fuentes de trabajo para los jóvenes que migran” de sus pueblos son cuestiones prioritarias, por lo que ratificó sus expectativas en torno la activación de ambas iniciativas.
Los voceros del municipio quiaqueño apuntaron finalmente que el recorrido desde La Quiaca a Larcas tuvo también el objetivo de relevar “el estado de la ruta desde el pueblo histórico de Yavi hasta la frontera con Bolivia, que presenta un terreno pedregoso y en algunos tramos angostos”.