La ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich puso oficialmente en marcha este lunes el Plan Güemes, una estrategia con epicentro en la localidad Aguas Blancas -en el departamento salteño de Orán, fronterizo con Bolivia-, y alcance hasta la Ruta Nacional 34, trazado que también recorre territorio de la provincia de Jujuy.
Con la llegada de la Prefectura Naval Argentina (PNA) para patrullar por primera vez las aguas del río Bermejo -que hasta ahora había sido controlado exclusivamente por la Policía de Bolivia-, y un comando unificado entre fuerzas federales y provincial, el Plan Güemes se cumplirá con 310 efectivos, vehículos y tecnología, en una primera etapa que se extenderá hasta marzo de 2025.
“Nuestra frontera norte siempre fue descuidada por todos los gobiernos nacionales y se llevaron los recursos que teníamos; tampoco se hizo inversiones en tecnología. Así es que desde el primer día no oculté una realidad que siempre existió. Para cambiarla había que mostrarla y necesitábamos la decisión política nacional”, dijo en el acto de presentación el gobernador salteño Gustavo Sáenz.
Bullrich explicó a su vez que Aguas Blancas es “uno de los lugares más importantes en que el Estado argentino, a nivel de su Estado provincial y de su Estado nacional, tiene que tener presencia” para cuidar los bienes, la propiedad, la vida de los ciudadanos y “una economía franca y limpia”.
NARCOTRÁFICO, CONTRABANDO Y TRATA DE PERSONAS
Aguas Blancas es una ciudad del departamento salteño de Orán, que se sitúa frente a la ciudad boliviana Bermejo, en el departamento Tarija. Están separadas por el cauce del alto río Bermejo -que se extiende en el extremo sur de Bolivia y el norte de la Argentina-, que allí hace de frontera natural entre ambos países.
El Plan Güemes en Aguas Blancas tiene el propósito de combatir los delitos federales en la frontera norte de Salta, con foco en los departamentos Orán y Aguas Blancas, áreas estratégicas conectadas con Bolivia.
Este plan de trabajo tiene “carácter integral”, según dijo la ministra, para combatir el narcotráfico, el contrabando y la trata de personas, al establecer una clara separación entre el control fronterizo vecinal, el control migratorio y la administración aduanera.
Bullrich explicó que ahora las fuerzas federales tienen presencia en Aguas Blancas a través de una Gendarmería “reforzada a su máximo nivel”, la Policía Federal Argentina “también reforzada” y con la “nueva fuerza” que es la PNA.
“Hemos venido también a esta zona a decirle basta al narcotráfico, al sicariato, a los caminos fronterizos sin control”, enfatizó Bullrich, y prometió que los salteños “van a recuperar sus calles y sus fronteras porque el narcotráfico, el terror y las calles tomadas por bandas criminales ya no tendrán lugar en esta región”.
El Plan Güemes pone en marcha un despliegue de fuerzas federales compuesto de 310 efectivos asignados a las áreas críticas, con una presencia intensiva en puntos estratégicos como el río Bermejo y la Ruta Nacional 34 -que también atraviesa territorio de la provincia de Jujuy-, conocida como la “Ruta de la Droga”, según fuentes oficiales.
El plan implica una estrategia de “abordaje criminal conjunta”, por la cual se coordinará esfuerzos entre fuerzas federales, provinciales y el Poder Judicial, incluyendo la colaboración con el Ministerio Público Fiscal, la Procuraduría de Narcocriminalidad y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos.
Las autoridades especificaron que el Plan Güemes se enfoca en la lucha contra el narcotráfico, por lo que las miles de familias que se dedican al comercio de mercaderías en la zona de frontera “no deben preocuparse”.
