El diputado nacional por Jujuy José Luis Martiarena adelantó lineamientos centrales sobre los que trazará la defensa de un proyecto de ley de su autoría que propone prorrogar la emergencia alimentaria -ordenada por el decreto N° 108/02 del Poder Ejecutivo Nacional- en toda la República Argentina por el termino de un año, a la vez que crear un "Plan Federal de emergencia alimentaria y nutricional", el cual deberá tener alcance sobre "el total de la población de la Argentina que tenga un déficit alimentario y nutricional", abarcando a niños, adolescentes, jóvenes, hombres, mujeres y adultos mayores.
En favor de su iniciativa el legislador argumentó que "a pesar de las promesas oficiales, la crisis afecta fuertemente a los sectores más débiles de la comunidad nacional, habiéndose aumentado fuertemente la pobreza y la indigencia" y se apoya en la posición hecha pública por la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la iglesia católica, que "ante el severo aumento de la indigencia, la pobreza, la desocupación y el aumento indiscriminado de la canasta básica le solicitó al Gobierno que declare en forma urgente la emergencia alimentaria y nutricional".
En ese sentido cabe señalar que el Poder Ejecutivo ha venido analizando en las últimas horas la posibilidad de extender por decreto la emergencia alimentaria dictada en 2002.
En opinión del legislador justicialista, "el Estado nacional no da respuesta a la crisis social", y observa que "por el contrario, ha permitido la especulación de la comercialización de alimentos, priorizando la exportación al consumo interno básico", lo cual, a su juicio, refleja "total desinterés en la alimentación de la población", de manera que "existe la ausencia sistémica de una política alimentaria nacional".
Planteado el diagnóstico, Martiarena cita: "Es un deber primordial del gobierno saber qué come el pueblo y preguntarnos si come bien, si come lo suficiente, si su alimento es el que conviene a su organismo físico, a su entidad espiritual y si llega a todos, hombres, mujeres, niños y ancianos, una alimentación sana, completa, adecuada y racional".
"La consigna, de plena vigencia en la actualidad -remarca Martiarena-, pertenece al expresidente Juan Domingo Perón, quien la pronunció en el Teatro Colón de Buenos Aires el 29 de abril de 1949 al inaugurar el curso de Política Alimentaria Argentina organizado por el Ministerio de Salud de la Nación".
Desde esa perspectiva sostiene que "el acceso a los alimentos en general, está condicionado por los ingresos de los que debe disponer la población para adquirir esos alimentos, aunque en situaciones de crisis sociales, ambientales o económicas, la provisión de alimentos dependerá de la ayuda alimentaria oportuna".
Dicho esto, explicó que su proyecto de ley prevé la creación del Consejo Federal de Emergencia Alimentaria y Nutricional, "integrado por el Estado nacional, las provincias, municipios y destinatarios organizados, empresarios de la alimentación, la Iglesia y todo actor que participe en la cadena de producción, comercialización y distribución de alimentos".
Asimismo propone la creación de una Comisión Bicameral de Seguimiento y Control del Congreso de la Nación "con amplia participación de las dos cámaras Legislativas Nacionales a efectos de realizar el seguimiento y control de la ejecución del Plan Federal de Emergencia Alimentaria y Nutricional".