Logró burlar la seguridad de uno de los edificios más protegidos y custodiados del mundo, y sin utilizar trucos especiales ni difíciles planes, simplemente entró.
Un nene se coló en la Casa Blanca de los Estados Unidos, y a raíz de eso se inició un insólito e inesperado protocolo de seguridad.
El infante logró filtrarse a través de las rejas que dan al lado norte del edificio. Y las hipótesis plantean que se habría tratado de un descuido de sus padres, cuando el niño se escapó.
El nene, que no parecía tener más de tres años, despertó todo un revuelo en el edificio gubernamental estadounidense. Y es que se debió activar de inmediato un operativo de agentes uniformados del Servicio Secreto, los cuales debieron “apresar” al intruso.
Lo informado por AP señaló que el niño era de una contextura tan pequeña que logró filtrarse por el enrejado. Los agentes debieron atravesar el Jardín Norte para poder buscar al menor, que estaba deambulando por allí. Finalmente, fue devuelto a sus padres, que observaban atónitos lo sucedido desde la Avenida Pennsylvania.
Luego, interrogaron por unos instantes a los padres, antes de dejarlos libres. Cabe resaltar que se ha colocado una nueva valla alrededor de la Casa Blanca, de mayor altura, pero con distancia entre los barrotes más amplia, la cual es de 12,7 centímetros.