El Ministerio de Trabajo de la Nación dictó un proceso de conciliación obligatoria en el conflicto de los controladores aéreos, por lo que este martes no habrá medidas de fuerza de este sector que pueda comprometer la operatoria aerocomercial en el país.
Durante la mañana del lunes trascendió que la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) había programado paros para el próximo martes 11 de enero, entre las 0.00hs y las 06.00hs.
Desde la Empresa Argentina de Navegación Aérea S.E., dependiente del Ministerio de Transporte, expresaron y reconocieron “la legitimidad del reclamo” de los trabajadores, a su vez que ratificaron “la voluntad de diálogo permanente para llegar a un acuerdo”.
La empresa estatal dijo que en este contexto, que ha afectado drásticamente los ingresos económicos de EANA S.E. al caer de manera notable el cobro de tasas por su servicio esencial de control de tránsito aéreo, la empresa debe aguardar la definición del Presupuesto 2022 para poder finalmente lograr un acuerdo.
Qué motivos dieron los gremios para efectuar los motivos de las medidas de fuerza gremial
Los motivos por los que se estarían realizando estas protestas por parte de empleados aeroportuarios, radican en que debido a la pandemia de coronavirus, “se agravó la situación de falta de personal que reclaman hace años”, tal como informó ATEPSA.
Asimismo, “hay trabajadoras y trabajadores que están realizando tareas con dotaciones por debajo de los mínimos de seguridad recomendados”.
Al mismo tiempo, se reclama por la empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), la cual responde al Ministerio de Transporte de la Nación, dado que no da respuestas al pedido de una revisión de la paritaria del 2021, la cual cerró en un 45%, por debajo de la inflación estipulada para este 2022.
Se realizó un relevamiento interno del sindicato, y el mismo constató que “el 51% de los trabajadores encuestados tiene compañeros y compañeras en estado de aislamiento y que no están prestando servicio”.
A su vez, este relevamiento señaló que “el 56% afirmó que el personal es insuficiente y está trabajando con dotaciones por debajo de los mínimos de seguridad recomendados y esto perjudica las operaciones y les genera más presiones y estrés”,