El operativo policial contra el Comando Vermelho terminó con un saldo de al menos 134 fallecidos en Río de Janeiro. La intervención, bautizada como “Contención”, contó con la participación de unos 2500 agentes que irrumpieron en las favelas de Penha y Alemão.
En medio del caos y la conmoción, trascendió que Heber Carvalho da Fonseca, miembro del Batallón de Operaciones Policiales Especiales (Bope), alcanzó a intercambiar unas últimas palabras con su esposa antes de perder la vida.
Heber Carvalho da Fonseca, de 39 años, formaba parte de la Policía Militar desde hacía 14 años. Durante su extensa carrera en el Bope, participó en múltiples operativos de alto riesgo y se destacó por su compromiso y entrega al servicio policial.
Así fueron los últimos mensajes que el policía le envió a su esposa antes de morir
“¿Estás bien? Dios te está protegiendo. Estoy orando”, escribió la esposa en el chat, de acuerdo con lo publicado por O Globo. A lo que el sargento respondió: “Estoy bien. Continúa orando”.
Con el paso de las horas y sin recibir noticias, la mujer volvió a enviarle mensajes, aunque esta vez no obtuvo respuesta: “Te amo. Cuídate, por favor. Hay muchos heridos. Amor, dame una señal de vida siempre que puedas”. También intentó comunicarse varias veces por teléfono, pero Heber nunca respondió.
Pocas horas después, llegó la trágica confirmación del fallecimiento del sargento. Devastada, su esposa publicó en redes sociales la captura del último intercambio de mensajes, junto a un conmovedor texto: “Y no volviste a hablar. ¿Y ahora, qué le voy a decir a Sofía?”, escribió en alusión a la pequeña hija que ambos tenían.
La esposa del sargento expresó públicamente su profundo dolor por la tragedia y recordó que octubre es el mes en que su hija cumple años, una fecha que —según confesó a O Globo— quedará marcada para siempre en la memoria de su familia.
Durante el operativo contra el Comando Vermelho (CV), tanto el sargento Fonseca como su compañero Cleiton Serafim Gonçalves, también integrante del Bope, resultaron gravemente heridos. Ambos fueron trasladados al Hospital Estatal Getúlio Vargas, donde lamentablemente murieron poco después.
