El fin de semana estuvo marcado por las largas filas de vehículos en las estaciones de servicios de Puerto Iguazú y zona aledañas. Algunos tuvieron que esperar hasta 7 horas para cargar sus tanques.
Con el comienzo de abril, se habilitaron nuevamente los cupos para la compra de combustibles por parte de las estaciones de servicio. Sin embargo, la llegada de los productos disparó la demanda por las naftas que, en esta ocasión, no llegó con la totalidad de las marcas para cubrir la creciente demanda.
Las largas filas también se vieron en otros municipios del Norte misionero, como Puerto Esperanza y Puerto Libertad, donde se observaron filas kilométricas sobre la ruta 12 para poder llenar los tanques.
Esta situación generó malestar en los automovilistas, que debieron esperar por horas para conseguir el combustible. Además en el medio de este caos, la venta quedó parada en las bocas de expendio ya que llegó el camión para la reposición. Inmediatamente se replicó la demanda tanto de vecinos de Iguazú como desde Foz de Iguazú.
A diferencia de ocasiones anteriores, en las estaciones de servicio no llegaron todos los productos. En algunas gasolineras se observó que no se logró reponer nafta premium, mientras que en otras se notó faltante de gasoil y súper.
El faltante de determinados productos en los surtidores de Iguazú generó preocupación e incertidumbre en vísperas de la llegada de la Semana Santa, cuando se estima un importante nivel de ocupación hotelera y el arribo de turistas de diferentes puntos del país.
Según indicaron los playeros la faltante de gasoil se intensificó, hecho que obligó a diferentes empresas de la zona a reorganizar los itinerarios de entrega de mercadería. Incluso, desde la Municipalidad también debieron modificar el esquema de recolección de residuos en el afán de garantizar el normal servicio en la Ciudad de las Cataratas.
En Puerto Iguazú, las estaciones de servicio deben cubrir la demanda de un parque automotor con 36.540 dominios registrados, a lo que se suma la demanda de vehículos extranjeros, que según indicaron los encargados, representa el 30% del cupo y el combustible que demanda los hoteles para el funcionamiento de generadores de energía.
Se estima que el aumento en los pedidos de nafta por parte de ciudadanos argentinos está directamente relacionado a la reventa que se practica en los barrios, además de los litros de combustibles que son llevados al vecino país por los trabajadores del volante, según aseguró Fredy Ríos en una asamblea de taxistas. Este negocio reduce en un gran porcentaje lo que venden las gasolineras de forma directa a los extranjeros.
Días atrás, desde la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Noreste (Cesane) se afirmó que desde las petroleras anticiparon que para este mes el envío de combustibles para Misiones será menor. “Ya nos avisaron que enviarán menos, porque no están produciendo porque dicen que no hay rentabilidad o que salen empatados con lo que envían”, explicó Faruk Jalaf, titular de la entidad.
Fuente: El Territorio