El lunes pasado en el límite este del Parque Nacional Iguazú; guardaparques nacionales sorprendieron a dos cazadores furtivos y lograron detener a uno de ellos, mientras que el otro logró escapar en el monte. El detenido es oriundo de la localidad vecina de Andresito.
El operativo se dio en el marco de las actividades de rutina y vigilancia del Cuerpo de Guardaparques Nacionales. El detenido llevaba una escopeta calibre 14, seis cartuchos del mismo calibre, dos linternas, un chuchillo tipo carnicero y ya tenía en su poder una pieza de un ejemplar de pecarí labiado conocido como “tateto”.
Gracias a los constantes trabajos de recorrida, control y vigilancia del Cuerpo de Guardaparques, se logró aminorar el ingreso de personas el área protegida, que se alistan con intenciones de cometer hechos delictivos contra la flora y la fauna del Parque. Por ello solicitan que, ante cualquier movimiento sospechoso, la ciudadanía de aviso inmediato al cuerpo de guardaparques.