Quejas interminables por las condiciones de hacinamiento en el Centro de Asistencia Sanitaria que funciona en el estadio Cincuentenario adonde llegan pacientes de COVID 19 positivo para ser asistidos hasta su alta.
Los baños que no dan abasto con la cantidad de gente, las temperaturas elevadas y un deficiente aire acondicionado, sumado a que quienes están ahí duermen con los reflectores del estadio prendido han causado varias crisis de nervios hasta la revuelta de este viernes por la noche. “Hay veces que no sabemos si es de día o de noche, es insano” expresaron a Vía Formosa.
Algunas jóvenes duermen vestidas, e inclusive se bañan juntas por temor a que pueda pasar algo. “El olor es insoportable, los baños están colapsados”. Las filas son de cientos de personas para ocuparlos.
Si bien al lugar llegan personas con el PCR positivo, también hay personas que con el paso de los días no tienen sus resultados y cuando finalmente los tienen les da negativo pero se quedan con la espantosa duda si no se contagiaron dentro de ese lugar.
El gobierno ha cometido graves errores al mezclar personas sanas con personas con coronavirus, causando en más de una oportunidad contagios a aquellos que depositaban su confianza en el estado.
Hace 24 horas una mujer, víctima de una crisis de nervios, estalló y reclamó entre llantos y gritos, “Miren esto baños señores ¿Dónde están nuestros derechos? Necesito el resultado de manera oficial. Llevo 48 esperando ver en la página el resultado que diga que mi hijo dio positivo en COVID”.
Agregó luego que: “El bebé está en condiciones inhumanas señora, mi hijo está sano, mi hijo no tiene COVID. Este nene de 12 años dice que tiene y donde viene una profesional que no me quiere decir ni la matrícula ni el nombre. Mi nena hasta ahora no presentó síntomas, yo necesito que me entreguen el hisopado de manera oficial, es lo que pido. Yo ya no voy a escuchar más nada porque me trajeron mintiendo acá”.
De manera angustiante gritó: “Por Dios, esto es un infierno, sáquenme de acá. Yo lo único que pido es que me saquen de acá. Sáquenme de acá mi hijo está sano, yo no quiero estar acá. Yo me quedo acá catorce días y voy a terminar contagiada también ¿Qué voy a hacer?” se preguntó.
Este viernes la situación se descontroló y varias personas rompieron las mamparas que dividían los grupos de camas y amenazaron con prender fuego a los colchones. Afortunadamente todo volvió a la calma pero los abusos y los excesos por parte del gobierno de Insfrán continúan. Cerca de la medianoche, la policía envió un grupo antimotines al lugar.
Vía País le planteó antes de la crisis de los asintomáticos y la situación de hacinamiento en el estadio Cincuentenario al Consejo de Atención Integral a la Emergencia COVID 19 y fue el Dr. Mario Romero Bruno el que respondió: “Son formas de ver la realidad, cada uno tiene una perspectiva y algunas entendibles y en estas situaciones que por ahí se presentan que son situaciones particulares. Estamos hablando que ya han pasado por los centros de aislamiento más de 15 mil personas”.
Agregó que: “Estas cuestiones son atendibles y van a ser atendidas pero acá no perdamos de vista el objetivo. El objetivo tiene que ser muy claro, todo es mejorable, lo vamos a mejorar en lo humanamente posible. No perdamos de vista el objetivo que es controlar la transmisión del virus”.
Estimó que: “Están demostrados los resultados que hemos tenido hasta la fecha de que los centros de aislamiento preventivo como de las internaciones de pacientes asintomáticos, que al principio no sabíamos si transmitían o no transmitían, hoy sabemos que son los que más transmiten”.
“A nosotros nos decían que los asintomáticos tenían que estar en la casa. Imagínese a cuantos hubieran contagiado si la provincia no hubiera tomado decisiones tan firmes para evitar el ingreso del virus. Tres meses tardamos en que el virus ingrese, casi siete meses sin tener ni un fallecimiento. Todo este resultado sanitario es prueba de la efectividad de las decisiones” aclaró.
Por su parte el Dr. Julián Bibolini, justificó la situación en el estadio Cincuentenario, “Están contempladas todas las normativas que se consideran para la habilitación de estos centros. El hacinamiento se da en lugares en donde si hay 10 camas, hay 20 personas”.
Agregó también que: “No es nuestra opinión ni consideramos una situación de hacinamiento, actualmente tiene una capacidad de 282 camas y no tiene esa cantidad de gente internada o sea que todavía hay camas disponibles. Obviamente cuando se empiece a llenar se empezará a utilizar otros centros para dar más comodidad”.