Vecinos y comerciantes de la localidad paraguaya vecina a Clorinda en Formosa, han comenzado a trasladar bolsas con arena para improvisar algunas barreras que no permita que el agua ingrese a sus casas o comercios.
En unos pocos días la amenaza de una brusca crecida se hizo realidad al tomar en las últimas 24 horas, las calles del casco urbano en la parte comercial de Nanawa, centro de compras de los turistas argentinos que solo tienen que transponer una pasarela para cruzar la frontera.
Varios comercios han decidido cerrar hasta tanto se detenga la crecida y trasladar sus mercaderías a otros depósitos en una zona más alta y al resguardo del deterioro que produciría un anegamiento del río.
Respecto de la conducta del río, todavía y según estimaciones de Prefectura Naval Argentina, tiene unos días más de crecida, tras los cuales empezará un lento descenso. Mientras tanto los afectados hacen lo imposible para resguardar sus bienes.