En una agencia de quiniela sobre la Avenida Italia del barrio San Pedro, cerca del mediodía de este día viernes, un delincuente que llegó en una moto, entró a robar con el casco puesto y armado con una pistola 9 milímetros.
La mujer que atendía , no pudo hacer absolutamente nada y solo atinó a entregarle la recaudación del día tratando de mostrarse en todo momento colaborativa para que la cuestión no pasara a mayores.
El sujeto actuó con absoluta impunidad y aunque el robo quedó registrado por las cámaras de seguridad como tenía el casco puesto no pudo ser identificado. Una vez cumplido su objetivo obligó a la mujer a agacharse tras el mostrador y se dio a la fuga de la misma manera que llegó.
La empleada utilizó el botón antipánico que tenían en el local pero la policía según su testimonio tardó mucho en llegar. También se sintió desolada por toda la gente que pasaba con el local vidriado y aunque salió gritando nadie hizo nada para auxiliarla.