El Gobierno nacional decidió suspender algunos de los aumentos previstos correspondientes a julio, como la luz y el gas, mientras que otros incrementos sí se aplicarán, como el combustible, según confirmaron fuentes del Ministerio de Economía.
Qué ocurrirá con el aumento de combustible
El Ministerio de Economía determinó que, con respecto al combustible, determinó que la alícuota del impuesto aumente un 1%, en lugar de un aumento mayor que hubiera implicado subidas del 16% en Córdoba y del 18% en el resto del país. A su vez, se suma el aumento que aplicarán las petroleras sobre sus productos, lo que podría resultar en un aumento total de entre el 3% y el 5%.
El precio de la nafta súper de YPF en la ciudad de Buenos Aires es de $905, en el caso de aumentar un promedio del 6%, costará alrededor de $960. Por otro lado, la nafta Premium de YPF, que actualmente tiene un costo de $1,117 por litro, aumentará hasta aproximadamente $1,300. El gasoil grado 3, su precio pasará de $1,196 a cerca de $1,270 por litro. Está previsto que los nuevos valores comiencen a regir a partir del lunes 1 de julio.
Qué ocurrió con el aumento de las tarifas de luz y gas
La decisión de mantener las tarifas de energía y gas surge en un momento en el que las proyecciones privadas de inflación analizaban una suba de los precios del 5,5% en junio, tras un incremento del 4,2% en mayo.
Durante el invierno, el consumo de gas tiende a aumentar, lo que se refleja en las facturas de los usuarios. Por lo tanto, esta medida de congelación ha detenido los aumentos del mes pasado, que fueron de entre el 9% y el 33% en gas y entre el 23% y el 156% en electricidad.
A principios de junio, el Gobierno ajustó los subsidios energéticos al modificar los límites para acceder al beneficio en cada una de las categorías:
- Los usuarios de la categoría N1 (altos ingresos): pagan la tarifa completa.
- Los de la categoría N3 (ingresos medios): reciben subsidios para consumos de hasta 250 kWh/mes.
- Los de la categoría N2: subsidios para consumos de hasta 350 kWh/mes.