Los ingresos provinciales por coparticipación y leyes complementarias se desplomaron entre 12 y 13% en noviembre como consecuencia de la reforma del impuesto a las Ganancias que impulsó durante la campaña electoral el ministro de Economía, Sergio Massa.
Este agujero fiscal fue eje de discusión entre los gobernadores y Massa durante esta semana ante la necesidad de financiamiento para hacer frente a los compromisos corrientes y en particular del pago del aguinaldo.
La controversia se saldó parcialmente con el compromiso del excandidato a presidente de un giro $ 110.000 millones correspondiente al Consenso Fiscal 2017 y $ 230.000 millones como Aportes del Tesoro Nacional (ATN).
La solución fue un parche hasta que asuma la próxima administración de Javier Milei y defina su relación con las provincias y cómo se manejará con la coparticipación federal.
La medida de Massa tomada en plena campaña electoral, pero también aprobada por toda la dirigencia política en el Congreso Nacional, obliga a buscar un mecanismo de compensación, entre los que se evalúa la coparticipación del Impuesto al Cheque.
Cabe recordar que Milei también levantó la mano por la positiva sin que medie un mecanismo de equilibrio en las cuentas y ahora deberá enfrentar el reclamo de las provincias del otro lado del mostrador. En ese sentido ya anticipó que no modificará la ley que benefició a los asalariados de la 4ª categoría.
Para la consultora Politikón Chaco durante noviembre los giros a provincias por coparticipación y leyes complementarias ascendió a $ 1.555.059 millones. Esta cifra es un 125,8% superior a la enviada en noviembre de 2022 ($ 688.634 millones), pero cuando se la ajusta por inflación resulta un 12,4% inferior. Este estudio fue realizado con una estimación propia de inflación para el mes que pasó de 11,5%.
En cambio para el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) la caída real fue de 13,6%, dado que su estimación de inflación para noviembre es de 13%.
Esta disminución es la más fuerte en más de tres años, desde junio de 2020 en medio de la pandemia de Covid.
“Al comparar el desempeño de noviembre respecto a igual mes de años previos, midiendo las transferencias en moneda constante, noviembre de 2023 se ubicó también por debajo de igual mes de 2021 (-6,2%), 2020 (-8,6%) y 2017 (-1,2%), aunque supera los niveles de noviembre de 2019 (+3,4%) y 2018 (+5,8%)”, detalló Politikón.
En medio de la campaña la situación de los tesoros provinciales se complejizó aún más dado que venían diezmadas de octubre, cuando por el mismo motivo habían recibido un 9% menos de ingresos que un año antes.
Cuando se analiza la situación anual, entre enero y noviembre de 2023 los envíos automáticos a las provincias acumulan una caída de 3%.
El informe de la consultora chaqueña calculó esta merma de ingresos reales en el año deflactada por la inflación de cada región (calculada por el Indec) y discriminada por provincias.
Allí se observó que el distrito que resultó más perjudicado fue la provincia de Buenos Aires con una disminución real de 4,4% (baja que luego fue compensada por otras vías). Las mermas más moderadas las tuvieron San Luis y San Juan con contracciones de 1%, producto de que sufrieron menores índices inflacionarios.
Mendoza se ubicó muy cerca con una disminución de recursos reales durante el año de 1,2%, mientras que para Río Negro fue de 1,7%.
En el caso de Córdoba, de acuerdo a la medición de Politikón Chaco la caída fue de 2%, siempre en términos reales.
El panorama para 2024 no luce mejor para los estados provinciales habida cuenta de que el presidente electo Javier Milei proyecta un duro ajuste fiscal que clausurará toda forma de financiamiento extra.
Incluso hay expectativa por la “Ley ómnibus” que prometió mandar al Congreso Nacional no bien asuma para su tratamiento en sesiones extraordinarias donde podría explicitar esa poda.
Además Milei ya anticipó que mantendrá la baja del impuesto a las Ganancias proyectado y la disminución del IVA en las compras de bienes de primera necesidad, que afecta la masa de impuestos coparticipables.
Distintos informes publicados en las últimas horas ponen el acento en que los recursos destinados a las provincias serán un objetivo de la “motosierra” debido a la imposibilidad de avanzar sobre otras áreas.
Ese recorte no se daría sobre los dineros coparticipables sino en lo que se conoce como transferencias discrecionales, que se canalizan por distintos fondos que dependen de la autorización del funcionario de turno.
Entre las diferentes “vías de escape”, la consultora LCG citó el Fondo de Incentivo Docente (FONID) que implica un complemento de ingresos para los docentes provinciales. “Este programa, que destina recursos a todas las provincias, absorbió 18% del monto transferido en los primeros 10 meses del año y representa la mayor partida de gasto transferida a los gobiernos provinciales”, detalló el informe.
Asimismo, relativizó el mito de los “Aportes del Tesoro Nacional” (ATN) que por ejemplo que durante 2023 apenas representaron el 0,02% del PBI.