La eliminación de San Martín de Tucumán del Reducido tras caer 1-0 ante Gimnasia de Mendoza desencadenó una serie de incidentes y represión en las inmediaciones del estadio albirrojo. La Policía local intervino con balas de goma para controlar a los simpatizantes del Ciruja, quienes se manifestaron en La Ciudadela.
Un ascenso frustrado
San Martín de Tucumán había sido el mejor equipo de la temporada y había llegado a la final por el primer ascenso, pero perdió ante Aldosivi. La derrota, aunque sin una importante diferencia, ante Gimnasia de Mendoza, fue el golpe final que puso fin al sueño de ascender a Primera.
Incidentes en La Ciudadela
Una vez finalizado del partido, un grupo de personas se agolpó en el estacionamiento de la cancha mientras profería insultos y cánticos contra los jugadores y la comisión directiva. Por este motivo, los futbolistas debieron permanecer durante más de una hora y media en el vestuario.
La represión policial
La Policía local intervino con balas de goma para controlar a los simpatizantes del Ciruja. La situación se volvió tensa y se registraron incidentes en las inmediaciones del estadio.