Micaela Acuña, que con sus 18 años era la flamante Reina del Ternero en Corrientes, perdió la vida el pasado fin de semana en horas de la madrugada en el río Paraná a la altura de Ituzaingó, Corrientes. Desde ese momento arrancó la investigación de la policía y la justicia.
Las hipótesis de trabajo comenzaron a desarrollarse con los primeros testimonios de los amigos que compartieron el momento trágico y los elementos que se encontraron en el lugar. Luego se sumaron testigos circunstanciales.
Los hechos irrefutables marcan el encuentro de tres parejas luego de las 18 horas en una zona de la costa cercana a la represa Yacyretá. La noche ya ganaba en profundidad y a eso de las 3 del nuevo día decidieron salir a pasear en una pequeña y precaria embarcación. Luego la negligencia del timonel sumado a la fragilidad del bote y la correntada de un río bravío fueron el combo de la tragedia. La vuelta de campana fue inevitable. La faltante de los elementos de seguridad de la embarcación dejó a merced de la noche a los jóvenes navegantes que lucharon por encontrar la orilla, cinco de ellos pudieron alcanzarla pero Micaela no pudo lograrlo.
Su cuerpo fue hallado tiempo después por personal de la Prefectura Naval, estaba con ropa de baño y sin signos de violencia física según el primer análisis de los médicos de la policía, que determinaron la muerte por inmersión en el informe preliminar.
Los resultados de la autopsia definitiva estarán dentro de 15 días estimativamente, pero existen versiones que hablan de la ingesta desmedida de alcohol. Lo concreto es que por estas horas será investigado el responsable de la embarcación por el exclusivo hecho de salir a navegar sin tener en cuenta las medidas de seguridad apropiadas.
