La justicia cordobesa resolvió elevar a juicio la causa penal originada por la trágica explosión de un tubo de oxígeno medicinal. El hecho ocurrió el 3 de septiembre de 2022 en una residencia particular de barrio Liceo Tercera Sección, lo que provocó la muerte de un niño de 11 años. El estallido ocurrió en el patio del inmueble, sitio adonde el recipiente había sido trasladado debido a una presunta pérdida de gas.
Un tubo de oxígeno explotó y mató a un niño en Córdoba
El Ministerio Público Fiscal (MPF) identificó a tres personas acusadas, vinculadas a la firma distribuidora de productos medicinales Medinor. Los imputados son Marina Soledad Alesso, en su calidad de directora técnica, junto a Claudia Marcela Farías y René Farid Yunes, como representantes legales de la empresa.
La Fiscalía de Instrucción Distrito 3 Turno 4 les atribuyó la responsabilidad penal por la comisión del delito de homicidio culposo. El organismo judicial consideró que estas personas violaron diversas normativas regulatorias vigentes, incumpliendo así el deber objetivo de cuidado profesional. Entre las transgresiones señaladas figura la comercialización del oxígeno con fines medicinales sin la correspondiente autorización emitida por el Ministerio de Salud.
Asimismo, la investigación reprochó a los acusados haber delegado el relleno y traspaso del gas a un trabajador que carecía de la experiencia y pericia necesaria. Esta actividad, considerada sumamente peligrosa para las personas, era desarrollada por la compañía de manera habitual.
En el momento de la explosión, varios niños se encontraban jugando cerca del lugar de la detonación. El dispositivo era utilizado por una mujer de 28 años que residía en el lugar.
