Miqueas Bazán, uno de los sobrevivientes de la tragedia vial en la ruta S-253, cerca de Río Tercero, recibió el alta médica luego de estar 10 días internado en el nuevo Hospital San Roque de la ciudad de Córdoba. Este miércoles, recordó lo sucedido aquel domingo fatal y brindó un dato clave para la investigación.
“Me acuerdo todo. Fue como si estuviera jugado al fútbol y tenés que chocar contra la pelota porque el otro jugador te viene a colisionar”, comparó el joven de 18 años sobre la mecánica del siniestro. Santiago Ávila, de 18 años, Uriel Barrionuevo, de 17 años, el padre de uno de los jugadores, Marcos Ayala, y el chofer del otro rodado, Iván Kozykariski, fallecieron tras el choque.
Conmocionado por la situación protagonizada en primera fila del vehículo, Miqeuas rememoró: “Ver esa chata en contramano sin ningún auto por detrás...se veía que venía en contramano desde varios kilómetros”. De esta manera, aseveró que el conductor de la camioneta provocó el choque.
EL SOBREVIVIENTE DE LA TRAGEDIA EN RÍO TERCERO AÚN NO ASIMILA LA MUERTE DE SUS AMIGOS
Por otro lado, el joven jugador que juega de lateral por izquierda confesó no haber asimilado la muerte de sus compañeros porque aún no pudo despedirlos como le hubiera gustado. “Quiero hacerlo como ellos quisieran ser recordados: ´con arenga, salir al campo y alentar al cielo por ellos´”, contextualizó.
Por último, Miqueas adelantó que volverá a su casa para iniciar el proceso de recuperación tras la fractura de su pierna y enumeró una serie de actividades que realizará: “Abrazar a mi hermanito, estar con mi familia, volver a ver a los chicos, despedir a los fallecidos y jugar al fútbol”.