Un vecino de la ciudad de Córdoba irá a juicio oral luego de haber matado a una perrita que pertenecía a su vecino, en mayo de este año, porque "le había comido el asado".
Se trata de Hugo César Rojas Jutton, quien además fue embargado por una suma de $ 300.000 mil pesos por este hecho que conmocionó a la provincia hace un par de meses atrás.
El acusado está imputado por "infracción a la ley contra la crueldad animal, daño y amenazas".
Todo ocurrió el 26 de mayo en el barrio Ituzaingó, mientras varios niños jugaban al fútbol en la calle Gutenberg al 5400.
El hombre, que estaba haciendo un asado en su casa, salió enfurecido de su patio incriminando a la perra, llamada "Kika", de haberse comido parte de la carne.
En ese momento sacó un arma y le disparó en la vereda delante de su dueño, un nene vecino de 10 años, quien estaba jugando con sus amigos y sufrió un shock emocional ante el acto de violencia.
Pero además, Rojas, quien sería chofer de colectivo, le dijo al niño que "le pague el asado o limpie la sangre".
El maltrato animal es un delito sancionado por el Código Penal a través de la ley 14.346, que prevé penas de 15 días a un año de cárcel.