Dio un giro judicial la investigación por el crimen de Wanda Navarro (15), la adolescente de Colonia Caroya hallada muerta en Jesús María hace tres semanas.
La menor salió de su casa en la mañana del jueves 23 de agosto. Su cadáver fue hallado dos días después, con golpes en la cabeza y marcas de estrangulamiento, en un descampado en Jesús María. Si bien estaba semidesnuda, la autopsia arrojó que no tendría marcas de abuso sexual, lo que en principio desconcertó a los pesquisas sobre la causa del asesinato.
Poco después fue arrestado un hombre de 29 años, vecino de la familia de Wanda, quien quedó imputado por presunto "homicidio simple". La familia Navarro, en tanto, se presentó como querellante en la causa.
El fiscal Guillermo Monti continuó trabajando con hermetismo. Este martes, el Ministerio Público Fiscal comunicó que el funcionario judicial dispuso el cambio de calificación legal de "homicidio simple" por la de "homicidio calificado por violencia de género" (femicidio), y que fueron arrestados otros dos hombres, uno de la ciudad de Jesús María y el otro de la ciudad de Colonia Caroya, en calidad de coautores bajo la misma imputación.
Estos dos sospechosos se habían fugado de sus domicilios.
"El fiscal contó con la colaboración de la Brigada de Investigaciones de la Departamental Colón y el Departamento de Homicidios de la Policía de la Provincia de Córdoba. Se continúa trabajando en distintas medidas probatorias y aguardando la recepción de resultados de las cooperaciones técnicas llevadas a cabo por las distintas secciones científicas de Policía Judicial", añadieron.
Monti no ahondó en detalles sobre los vínculos de los detenidos con Wanda Navarro, ni las circunstancias en que fue atacada cuando salió de su casa.