Por haber cometido 10 graves delitos fue condenado a 17 años de prisión Carlos "Chocolate" Murúa, un joven de 20 años que carga sobre sus espaldas con dos asesinatos: el de Tamara Gómez (13), cuando era menor de edad, y el de Ramiro Bazán (18), en el medio de una balacera que también tuvo como blanco a otros cuatro jóvenes.
La locura de 10 hechos por los que este lunes fue condenado "Chocolate" Murúa comenzó hace dos años, el 10 de diciembre de 2015 a las 19.30. Aquella tarde, tras una persecución, la Policía le secuestró una de las 72 pistolas robadas en Jefatura. Aunque fue condenado por la portación, aún espera juicio en el marco de la causa que investiga cómo fueron sacadas de la sede policial.
El raid terminó seis meses después, el 20 de junio de 2016, cuando junto a otros dos adolescentes (uno de ellos, menor de edad), disparó contra un grupo de adolescentes unos 30 tiros en la esquina de Porto y Mariño, en Villa Alberdi, y asesinó a Ramiro Augusto Bazán. Recién entonces fue trasladado a Bouwer, desde donde saldrá dentro de casi dos décadas.
Durante esos 10 delitos cometidos en seis meses, "Chocolate" disparó (junto con sus eventuales cómplices) unas 60 veces contra vecinos de Villa Urquiza y Villa Alberdi.
Antes de estos crímenes, en 2013, Murúa ya había sido considerado responsable de la muerte de Tamara Gómez, una niña que esperaba a su mamá en la puerta de una verdulería de Villa Urquiza, cuando un balazo disparado por "Chocolate" la atravesó.
El crimen que lo llevó a la cárcel, el asesinato de Ramiro Bazán, ocurrió el 20 de junio de 2016 a las 22, aproximadamente, pero comenzó antes: ese mismo día, a las 16, "Chocolate" disparó 12 veces contra Gian F.C. cuando éste pasó en moto por la esquina de Irós e Igualdad, en Villa Urquiza.
Seis horas después, Murúa y dos de sus cómplices llegaron a la esquina de Igualdad y Porto y Mariño, a 200 metros de donde "Chocolate" había atacado a Gian F.C, y abrieron fuego con dos pistolas 9 milímetros y una calibre 22. Murúa se paró en el medio de la calle, y cada uno de los cómplices a los flancos.
Entonces, comenzaron a disparar y avanzar hacia la casa de Porto y Mariño 684, donde estaban Gian F.C. Sebastián B., Néstor Y., Eliana Y. y Ramiro Bazán. Los adolescentes corrieron hacia Costanera, escapando de la furia asesina de los tres tiradores.
Un balazo le dio a Gian a la altura del tórax, del lado izquierdo, y afectó su pulmón y el estómago, entre otros órganos. Estuvo al filo de la muerte, pero sobrevivió. Dos balas hirieron a la única chica del grupo, Eliana. También sobrevivió. En cambio, la bala que impactó en el tórax de Ramiro Bazán le provocó un shock hipovolémico que lo mató en pocos minutos.
Los delitos que Chocolate confesó este lunes, en el marco de un juicio abreviado, son portación ilegal de arma de guerra, abuso de armas, amenazas, violación de domicilio, tentativa de homicidio agravado, resistencia a la autoridad, daño agravado y homicidio simple agravado. Varios de los crímenes fueron agravados por haber utilizado "Chocolate" Murúa como cómplice a un menor de edad. La Cámara Tercera del Crimen le impuso 17 años.