Antonio Maroli, padre del único tripulante cordobés del submarino ARA San Juan, dijo este lunes que le resulta "esperanzadora" la hipótesis de que se trate de una falla en las comunicaciones. "No hay otro indicio que no sea el de una falla en las comunicaciones", dijo el hombre a Radio Mitre.
Antonio tiene 88 años, y es padre de Víctor Andres Maroli, un cordobés oficial teniente de navío que está en la Fuerza desde 2006.
“Tuve contacto el día antes de que partiera, de ahí no me he comunicado más con él”, contó el hombre, y dijo que está en contacto con la familia de Víctor, radicada en Mar del Plata.
"Si hay algo, me van a avisar. Por ahora no tienen ninguna novedad. Seguramente habrá un parte de la Armada al mediodía, y otro a eso de las 8 de la noche, con el resumen de las tareas diarias. El resto, son conjeturas", sentenció.
Investigación. Mientras, nada se sabe del ARA San Juan desde el miércoles pasado, cuando hizo su última comunicación con la base. Realizaba el recorrido desde Ushuaia hasta Mar del Plata cuando perdió contacto.
La Armada Argentina había confirmado más temprano que el submarino había comunicado un principio de avería en una batería antes de perder contacto el último miércoles, lo que lo obligó a "cambiar la derrota" y dirigirse directamente hacia Mar del Plata.