Durante la madrugada del 27 de octubre tres presos condenados y diagnosticados con Covid-19 positivo, lograron romper una ventana del anexo del hospital Aurelio Crespo para escaparse.
De esa forma, abandonaron el predio carcelario de Cruz del Eje. Luego de una intensa búsqueda, fueron identificados y capturados. Por la fuga de Adrián Alberto Herrera, Edgardo Marcelo Merlo Barrientos y Enzo Gabriel Mercado quedaron imputados por el delito de evasión.
Sin embargo, recientemente la Justicia provincial decidió imputar (sin detener) a once empleados penitenciarios de la Cárcel de Cruz del Eje, según informaron fuentes judiciales a La Voz. Se les atribuye supuesta responsabilidad en la fuga.
Los guardiacárceles fueron acusados por incumplimiento en los deberes de funcionarios públicos, por orden de la fiscal de Deán Funes, Fabiana Pochettino. Además, los efectivos fueron puestos en situación pasiva por orden del Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario.Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario.
El hecho
Según detalla la investigación, la alarma se activó cuando los presos forzaron la ventana pero el personal penitenciario la apagó sin comprobar lo que había sucedido.
Recién a las 8 de la mañana, se detectó la desaparición de los reclusos. Cuando el operativo finalmente se montó, los internos ya habían roto alambrados y llegado al exterior.
Por eso, se los imputó por incumplimiento en los deberes de funcionario público, un delito que apunta a una "negligencia más que avanzada", aunque "sin llegar al dolo, o la intención", señalaron fuentes con acceso a la causa.