Nino Molina, el delantero con una historia sacrificada y que quiere Gloria

Es goleador en la Primera local que marcha puntera en Liga Cordobesa. Perdió a su madre cuando tenía 13 años y se crió con los hermanos y un tío. Colocaba adoquines en la calle. Y ahora la rompe en Instituto.

Nino se iba y volvía caminando de Mosconi a Villa Esquiú. Una vida dura.
Nino se iba y volvía caminando de Mosconi a Villa Esquiú. Una vida dura.

A Claudio Molina, conocido como Nino por sus compañeros en la Primera local de Instituto y que lo llenan de elogios porque es un goleador con futuro, todo se le hizo difícil desde chico.

A los 13 años perdió a su madre, se crió con sus hermanos, adoptados por un tío. Trabajó colocando adoquines en la calle y cuando juegó en Belgrano se iba desde su barrio, General Mosconi ( el de Wanchope Ábila), a Villa Esquiú caminando. Y volvía caminando después de entrenar.

Conocé toda su historia, publicada por el sitio oficial de Instituto.