"¿Vas a demorar mucho? El teléfono se me está quedando sin batería y lo necesito por cualquier cosa", la que responde con esa frase del otro lado de la línea es Mónica Correa, empleada de la comuna de Copacabana, epicentro de uno de los devastadores y voraces incendios que azotan a la provincia de Córdoba desde hace varios días.
La mujer atendió el llamado de Vía Córdoba en el único teléfono que posee la comuna ya que carecen de señal de telefonía móvil. "Sí, sí, es verdad es el único teléfono que tenemos. El otro medio de comunicación es a través del wi-fi de las escuelas. Pero fijo éste es el único", aclara Mónica ante la incredulidad de este periodista.
La entrevista tenía que ser breve para evitar que entrara algún llamado urgente y que no sea atendido o que alguien necesitara realizar una llamada, todo antes que se agote la batería. "Hace tres días que no lo cargo y estuvo al rojo vivo, aguantó bastante. Ahora me tengo que ir hasta el lugar donde lo cargamos", explicó Mónica.
"En estos casos de urgencias se llama a éste. Es un teléfono para la comunidad en general, pueden venir y llamar. Lo pueden hacer en los horarios en los que estoy yo de 9 a 12.30 o de 16 a 18, 19 o 20..no hay horario de salida. Y en caso de urgencias, fuera de esos horarios, puede ir hasta mi casa porque me llevo un inalámbrico ya que hasta ahí llega la señal", agrega.
Si bien este dato ya es una particularidad en sí misma, todo tomó mayor trascendencia por los incendios que arrazaron con una gran cantidad de hectáreas en la zona. "Nosotros lo veníamos viendo. Sabemos que cuando empieza en Villa Albertina si no lo controlan viene para acá y esta vez se desbordó", se lamentó.
"El jefe comunal llevó un grupo de personas camino a Ongamira para empezar a trabajar e intentar atajar el fuego, pero el martes vino viento sur a la noche y no pudieron hacer nada. Hicimos un llamado al departamento de bomberos y nos dijeron que ya había gente trabajando, pero estaban desbordados había poco casi nada de bomberos", se lamentó.
Si bien Mónica indicó que había bomberos, enfatizó que estaban en "donde ya se había quemado. La gente del lugar se había organizado para entrar por chacras y ahí no había bomberos. Estaban mal informados o no sé qué pasó. A última hora, cuando ya se había desbordado, me llaman de Manejo del Fuego, para preguntarme si la situación era tan grave como se decía".
Ese momento era crítico ya que las llamas se encontraban a un kilómetro y medio de las viviendas y avanzaban a gran velocidad. "Ahí es cuando mandan los bomberos de Capilla del Monte, Cruz del Eje y Jesús María. Ingresan casi a las 12 de la noche del sábado y pudieron evitar que llegue a los hogares", indicó Mónica.
Por el momento el fuego no está controlado y en Copacabana continúa sobre las Sierras del Pajarillo, bajando a Las Crucecitas. "Si había tres bomberos con mochila no se pasaba", asegura Mónica que le comentan algunos pobladores sobre el inicio de los incendios.
Graves consecuencias. El fuego arrasó en la zona de Copacabana y todo quedó a la vista, pero lo que no quedó tan expuesto y se conoce ahora es la emergencia económica en la que quedarán sus pobladores. "La problemática de nuestra zona es que se quemó la materia prima con la que se hacen las artesanías", añade Mónica
Es que en esa zona se trabaja con una especie de palmera con la que los artesanos realizan canastos y diferentes producciones. "Se quemaron hectáreas de materia prima, está bastante dificil. Hay gente que se le quemaron campos enteros", concluye.
*Foto: Ariel Luna*
