Alejo Ledesma es el primer pueblo de Córdoba en instalar un control sanitario las 24 horas en el ingreso a la localidad, y carpa hospitalaria para atender posibles casos de COVID -19.
En el puesto, personal de Salud, Juzgado de Faltas y Policía, miden la temperatura corporal y hacen un riguroso control de las personas que llegan.
También se colocó un arco de sanitización por el que pasan todo tipo de vehículos, evitando de este modo la propagación del virus.
Al frente del municipio, situado a 330 kilómetros al sudeste de la capital cordobesa, se encuentra el intendente Marcelo Agustín, por cuarto mandato consecutivo. Y dispuso una serie de medidas sanitarias desde el día del aislamiento por la pandemia.
Las autoridades mantuvieron conversaciones con transportistas, acopiadores y productores de la localidad para hacer frente entre todos al estado de emergencia sanitaria. Y decidieron controlar la entrada, circulación y permanencia de camiones de transporte agrícola en el ejido urbano.
Toda la localidad estuvo muy comprometida con esta lucha contra la pandemia y gracias al aporte de productores, comercios e instituciones locales se recaudaron más de 4.100.000 pesos, con lo cual fue posible adquirir una carpa sanitaria de 8 por 12 metros.
Además equipamiento para dos ambulancias, dos monitores multiparamétricos, un electrocardiógrafo, un sistema de digitalización para equipo de rayos x, y materiales de construcción para hacer posible la división del hospital en dos zonas, en caso de que surja algún paciente con COVID-19.