El gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, recibió este martes al arzobispo Carlos Ñañez y al obispo auxiliar Pedro Torres, a quienes entregó el protocolo que contempla la apertura de las iglesias para oración individual y atención de fieles.
El documento elaborado por el COE, que alcanza a los credos religiosos que integran el Comipaz, no permite, como medida de prevención en esta fase del aislamiento preventivo y obligatorio, misas u otra celebración religiosa que implique aglomeración de personas.
Instrucciones generales que se desprenden del nuevo protocolo:
- Los templos de culto podrán abrir sus puertas de lunes a domingo de 14 a 20.
- En su interior se podrán realizar las siguientes actividades: oraciones individuales; confesiones; ayuda y orientación espiritual individual; y cualquier otra actividad vinculada con el culto religioso que no implique gran concurrencia de personas.
- Se prohíben las celebraciones de misas y de cualquier tipo de celebraciones comunitarias.
- El líder espiritual previamente acordará los turnos para recibir a los fieles que soliciten ayuda, orientación espiritual o confesiones.
- No deberá haber agua bendita en las pilas.
:
- Se dispondrá de solución de agua con alcohol al 70% o alcohol en gel al ingreso del templo.
- Deberá emplear barbijos y/o tapabocas.
- Se permitirá el ingreso de una persona cada 20 metros cuadrados.
- No podrá haber más de una persona por banco.
- En las confesiones se guarde la distancia necesaria sin que perjudique a la confidencialidad.
- Ambos llevarán mascarilla y se respetarán las medidas de higiene.
- A la salida, se ha de velar por la salida ordenada. Las puertas del templo deberán permanecer abiertas para permitir la ventilación del mismo, durante las horas de funcionamiento.
- Se deberá evitar la manipulación de objetos litúrgicos, bancos, puertas y manijas.
- Se dispondrá de un camino de entrada y de salida el cual deberá ser desinfectados con regularidad.
- Se mantiene la imposibilidad de asistir a los templos a los grupos de riesgo.
Schiaretti explicó que "en esta primera etapa de flexibilización de la cuarentena, los templos están abiertos para la oración individual y también para que los fieles reciban el conforto espiritual que precisan". En este último caso, el protocolo establece la necesidad de establecer un cita previa.
El mandatario, tras el encuentro con autoridades de la iglesia católica concretado en el Centro Cívico, pididó que "actuemos en esta etapa de flexibilización con responsabilidad social. Esa es la garantía de que nuestra Córdoba pueda volver progresivamente a la normalidad», puntualizó.