La imposición de la cuarentena total que emanó el gobierno central y que Córdoba acata a rajatabla comienza a mostrar fisuras y en los barrios cordobeses se replica la escena de comerciantes que no pueden seguir con las persianas bajas.
Por caso, tres lavaderos de autos decidieron ignorar la prohibición de trabajar y abrieron hasta que fueron denunciados por sus propios vecinos.
Así las cosas, con la presencia de la Policía, tres lavaderos fueron obligados a cerrar ayer, en los barrios Los Plátanos, Ameghino y Pueyrredón, según informa el Ministerio Público Fiscal.
Las denuncias fueron varias, al número 0800 888 0054, por lo que la fuerza policial concurrió a estos negocios a los que obligó a cerrar y labró actas contra sus propietarios, a quienes les recordaron que su actividad comercial continúa restringida.
El procedimiento fue realizado por efectivos de Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA), que prestan colaboración en el patrullaje relacionado al dispositivo montado por el coronavirus.
