El ingeniero biomédico Guy German y su equipo de investigadores de las universidades de Binghamton y Nueva York desarrollaron películas muy delgadas y ópticamente transparentes de ADN, que sometieron a luz ultravioleta. Descubrieron que cuanto mayor era la exposición, mejor absorbía los rayos.
Este invento podría convertirse en la nueva alternativa para protegerse del sol, ya que proporciona a la piel una mejor defensa frente de los rayos ultravioletas y que es más eficaz cuanto mayor es la exposición.
Además, las películas de ADN son higroscópicas, lo que significa que la piel pude almacenar y retener mucho más agua, al retrasar su evaporación, por lo que mantiene los tejidos hidratados durante largos periodos.
"No solo creemos que puede tener aplicaciones como protector solar e hidratante, sino que al ser ópticamente transparente, proteger la herida de los daños del sol y mantener la piel hidratada, sino que tiene potencial para usarlo para cubrir lesiones un medios extremos", detalló German.