Fue una travesura del perro, pero causó preocupación y los Bomberos del Destacamento 1 debieron actuar para sacarlo de la difícil situación. Ocurrió en el Cordón Forestal en horas de la tarde ayer.
El can, jugando, introdujo su cabeza en un hueco en una madera y quedó atorado, sin que pudiera salir y sin que los esfuerzos de sus dueños pudieran hacer algo para sacarlo. Motivo por el cual decidieron llamar a los bomberos que, luego de varios minutos, lograron retirarlo de la incómoda posición. Felizmente no sufrió heridas.