"Se piensa en el desarrollo productivo de la provincia, con las energías renovables en ese marco y con empresas tributando como corresponde. No existe un impuesto al viento, sino que pensamos en el recurso como motor de desarrollo y generador de riquezas", detalló Arcioni.
"Estamos más preocupados en generar inversión y desarrollo de energías limpias y garantizarlas con seguridad jurídica, que en recaudar impuestos. Alentamos las actividades productivas sustentables y generamos las herramientas para su fomento y radicación en la provincia", sostuvo.
“La provincia que planificamos requiere de importantes inversiones en el sistema de transmisión eléctrica y una mayor interconexión, y eso se podrá lograr con una mayor rentabilidad para Chubut, en base a lo que acá se produce”, sostuvo Arcioni.
Existe en el país la Ley Guinle, "quien fue promotor de la normativa sobre energías renovables, por la cual hoy vislumbramos una reconversión en los paradigmas energéticos".