El aberrante hecho se comenzó a producir a principios de agosto del año 2016, cuando María Acosta pidió permiso a 2 mamás para llevar de paseo a sus hijas de 14 años, desde Trelew a Puerto Madryn. Nunca más volvió. Las familias hicieron las denuncias y la policía su trabajo.
Las menores, junto a otra nena de 12 años, fueron secuestradas, llevadas a Buenos Aires y obligadas a prostituirse (por la fuerza) por Acosta y Rodolfo Barrionuevo -su pareja-. Prácticamente no les daban de comer, las drogaban permanentemente, no les hacían usar preservativos, y no les dejaban tener contacto con sus familias.
Sobre fines del mismo mes -10 días después de la desaparición- la policía pudo dar con los secuestradores y las víctimas, luego de un intenso trabajo. Se pudo detener a la pareja y atender debidamente a las pequeñas, cuya declaración coincidente y creíble, permitió determinar la culpabilidad de los dos mayores.
María de los Ángeles Acosta y Rodolfo MauricioBarrionuevo fueron condenados a 12 años de prisión. El Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia los sentenció por explotación sexual, engaño y amenazas, abusando de la vulnerabilidad de las menores víctimas para prostituirlas en Plaza Miserere de Capital Federal.