Luego del rechazo al proyecto de legalización del aborto en el Senado de la Nación, la organización Coalición Argentina por un Estado Laico (CAEL) impulsó una campaña masiva para apostatar de la Iglesia Católica.
El lugar de encuentro fue en la sede del Arzobispado de la ciudad. En las puertas del edificio, había presencia policial. Un grupo de personas concretó su salida de los registros de la iglesia católica y recibió la documentación correspondiente al acto.
Al no darse de baja de la institución, no forman parte simbólicamente de una religión que muchas veces se da de hecho. Sin embargo, al salir de sus registros es la forma de materializar este derecho.