- La pulsera espía
Relojes inteligentes y pulseras de actividad recolectan 250.000 datos diarios del usuario. Muchas empresas trabajan para detectar cambios sutiles en la respiración, la frecuencia cardiaca, el patrón de sueño y la temperatura que alerten de posibles positivos antes de que den más síntomas. ¿Llegarán al campo?
- ¡No se toca nada!
Que bares y restaurantes estén cambiando las antihigiénicas cartas y menús por códigos QR impresos en las mesas y escaneables con el móvil solo es la punta del iceberg de la irrupción avasalladora de la tecnología contactless. Cerraduras, iluminación, dispensadores…
Y de paso paga tu combustible en la estación de servicio sin que manipulen tu tarjeta.
- Adiós a los botones
Si le da resquemor pulsar el botón de semáforos y ascensores, no es el único. Una víctima colateral de la pandemia será el botón, que lleva cinco mil años entre nosotros. Sobrevivirá en nuestras prendas de vestir, pero no como sistema de encendido y apagado. El ON/OFF manual quedó en jaque casi mate.
- Gigantes al servicio de todos
Las corporaciones tecnológicas no podrán seguir en ‘el lado oscuro’. Los gobiernos quieren que colaboren más, no solo a la hora de pagar impuestos, sino asumiendo el papel de un servicio público. Hay mucha predisposición en las aplicaciones de rastreo más usadas en varios países, ahora podemos ver el índice de transporte y congestión como indicador de actividad.
- La consagración del dron
Los satélites de posicionamiento han sido determinantes en el éxito de China en frenar la pandemia. No solo en el rastreo de los contactos de los contagiados, sino en el reparto de alimentos y medicinas mediante drones, que han desinfectado y vigilado zonas confinadas. Acá el campo tiene todo por desarrollar ya que el dron y su paquete vinculante es una herramienta de muy fácil adopción, uso y manejo con grandes ventajas que lo posicionan como parte obligada de lo que vino a quedarse.
- El robot ultravioleta
Otro aliado de los países asiáticos han sido los robots. Han preparado y servido comidas en hospitales y restaurantes, han dispensado gel hidro-alcohólico…
Se los ha provisto de termómetros conectados a la nube y de emisores de radiación ultravioleta para esterilizar espacios cerrados. La alta concentración en muchos lugares requiere nuevas adopciones en la conducta humana que vienen para quedarse, el campo no está afuera de este modelo.
- Trabajo en casa - Home Office
Se redescubrió la baja de costos, no al 100% en guarda hermética, ya que la interacción humana está demostrado sigue siendo más sumadora a través de los buenos procesos para obtener buenos resultados pero algún día de la semana o dos serán de home office. La administración del campo con conectividad esta para dar el salto.
- El tapabocas
Elemento impensado hace algún tiempo hoy es parte del atuendo que nos toca usar, yo diría por largo tiempo. debido a su eficaz tarea cumplida en la rebaja del tipo de contagio habitual que el virus nos propone. Saca la cuenta cuantos llevas usados en esta pandemia.