La Policia Federal ingresó con perros y cámaras. Todo se desarrolló con tranquilidad. La Justicia no buscaba dinero en las tres propiedades de Cristina Kirchner que el juez Claudio Bonadio allanó en el marco de la causa de los cuadernos de la corrupción.
Los operativos buscaban "corroborar los dichos de varios testigos" sobre espacios físicos en las dos propiedades ubicadas en Santa Cruz y en el departamento del barrio de Recoleta, ubicado en Uruguay y Juncal. Además, se buscó conocer la "estructura, espacios" de las propiedades como "posibles lugares de almacenamiento", como pudo conocer Clarín.
En este contexto, se indicó que los operativos “responden a un protocolo de actuación”, es decir “se procede de la misma manera en un allanamiento que se efectúe en la Villa 31 como en el quinto piso de Uruguay y Juncal”.
Los efectivos federales observarvaron la estructura de los espacios, buscaron lugares de posible almacenamiento, corroboraron la distribución de algunos lugares en función de los testimonios que hay en la casa respecto a quienes habrían llevado bolsos con dinero a los inmuebles.
Asimismo, en el caso de la propiedad de la calle Mascarello en la capital santacruceña, se pedirá al juzgado del juez Julián Ercolini la certificación de los planos de la casa ya que la misma se encuentra investigada en el expediente Los Sauces SA.
Las fotos del operativo
Pasadas las 18 30 horas finalizó el allanamiento en la casa de Cristina Fernández, ubicada.
Una veintena de personas que participaron del procedimiento ordenado por el Juez Claudio Bonadio, entre las cuales se encontraban los dos testigo convocados por la justicia, dejaron la vivienda en vehículos particulares,un utilitario y dos camionetas de la Policía Federal, y se llevaron los mismos elementos con los que ingresaron, una impresora y una caja, sin que se pudiera comprobar si hubo secuestro de algún elemento del interior de la casa. N o obstante se sabe que se tomaron fotografías y se filmó todo el operativo.
En tanto desde el entorno de Cristina Fernández de Kirchner se denunció que los testigos que ingresaron con el personal de las fuerzas de seguridad que allanan la casa, tenían vinculación con el principal dirigente opositor de la provincia, el senador Eduardo Costa.
Según las fuentes kirchneristas, los dos testigos pertenecen a la agrupación Jubilados Unidos, un sector crtítico del gobierno de Alicia Kirchner, que mantiene fuertes raclamos contra la gestión de la caja de Previsión Social provincial.
No obstante desde esa agrupación se negó que alguno de sus miembros participara de ese procedimiento y se aclaró que podrían ser de la agrupación "Jubilados Unidos en Acción", un grupo que se escindió el año pasado durante las protestas frente a la Casa de Gobierno provincial.
La versión comenzó a circular en redes sociales, pero nadie confirmó si efectivamente se trataba de dirigentes del sector pasivo.
Por otra parte, el hermetismo policial no permitió conocer como se seleccionó a los testigos que ayer y durante mas de tres horas asistieron al procedimiento en el interior de la Casa de Cristina Kirchner en Río Gallegos.
La casa ubicada en la calle Mascarello 441, del barrio Jardín de la ciudad de Río Gallegos mientras se desarrolla el allanamiento ordenado por el Juez Federal Claudio Bonadio.
Se trata de una propiedad, que la familia Kirchner, habría adquirido en 2010 y el inmueble cuenta con 348,9 metros cuadrados cubiertos de la vivienda. Fue tasada por el Tribunal de Tasación de la Nación (TTN), por un valor era de U$S 570.000: más del doble de los U$S 250.000 que declaró la firma de Cristina Kirchner.
Antecedentes
Cabe recordar que el 6 de enero de 2017, el Juez Bonadio había allanado en la capital de Santa Cruz, tres domicilios, vinculados a la familia Kirchner, en el marco de la investigación de la causa "Los Sauces": En esa oportunidad, el mismo magistrado que hoy lleva adelante el procedimiento en la vivienda de Mascarello 441, facultó a las fuerzas federales para entrar en la inmobiliaria "Sanfelice Sancho & Asociados", ubicada en la avenida Kirchner ( ex Roca) y uno de cuyos dueños era Máximo Kirchner, hijo de Cristina y actual diputado provincial.
Simultáneamente, se había allanado un local ubicado al 496 de la misma avenida y otra vivienda en la calle Maipú 255, de Río Gallegos. Todos los domicilios allanados en esa oportunidad estaban vinculados con la ex familia presidencial.
En esa oportunidad Bonadio había facultado a los uniformados para usar la fuerza pública, pero no habría sido necesario, algo que tampoco hizo falta en los operativos de hoy.