Hace 20 años, la Legislatura Porteña daba su aprobación para crear la línea F de subte, que planeaba unir los barrios de Barracas y Palermo. Tras llamados a licitaciones internacionales que no brindaron ninguna respuesta, Subterráneos de Buenos Aires S.A (Sbase) anunció que comenzará a realizar los estudios de ingeniería con personal propio, que servirán para elaborar los pliegos de licitación de la obra.
El presupuesto original, que fue cancelado, era de 5 millones de dólares. De hecho, esa cifra iba a terminar ascendiendo hasta los 10 millones. Sin embargo, Sbase remarcó que desarrollar los estudios para la obra con equipos propios implicaría un gasto de 3 millones de dólares.
Desde la empresa informaron que “el primer tramo a desarrollar es el que va desde la Estación Constitución de la Línea C hasta Callao de la Línea D”. “Permitirá adaptar el desarrollo de la línea a una Ciudad que se ha configurado de una manera diferente”, señalaron.
Una construcción que lleva más de 20 años en suspenso
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires remarcó que adaptarán el proyecto a los cambios que tuvo la city porteña. Además, hicieron un punto especial en el contexto macroeconómico que vive el país.
La construcción de la línea F estuvo más de 20 años frenada. La primera vez que se había hablado de ampliación de la red de subtes actuales fue en 2001, cuando se aprobó por la ley 670, donde también se sumaron las líneas G (Retiro-Agronomía) e I (Parque Chacabuco-Nuñez).
Cómo es el proyecto de la línea F
El principal objetivo del proyecto es llegar primero a las zonas densamente pobladas y con mayor cantidad de actividades. Además, buscarán optimizar el uso de la infraestructura existente y priorizar la conectividad con otros medios de transporte.
La idea original era que esta línea uniera Barracas con Palermo en un recorrido de 8,6 kilómetros y que cuente con 13 estaciones, pasando por debajo de algunas de las avenidas más importantes de la ciudad como Juan de Garay, Entre Ríos, Callao y Las Heras.
El estudio de ingeniería se enfocará en el primer tramo a construir, que unirá Constitución con la Plaza Rodríguez Peña, a metros de la estación Callao de la línea D. Tendrá 5,2 kilómetros y 6 estaciones y, a futuro, permitirá combinar con todas las líneas menos con la H.
En el Gobierno porteño consideran prioritario a este tramo porque, por un lado, facilitará el desplazamiento norte-sur, descongestionará la Línea C y potenciará el uso de las otras líneas radiales (A, B, D y E). Por el otro, coincide con la zona más densamente poblada del trazado previsto. Según cifras oficiales, en esa zona residen 213.000 personas y se calcula una demanda diaria de entre 270.000 y 300.000 pasajeros.